PERU: Demografía 2011

Bomba demográfica

Por Federico Salazar

La República, Lima, Dom, 16/01/2011

El Perú está en crisis demográfica. No somos demasiados, sino, al contrario, muy pocos. La población alcanzó el año pasado los 29 millones 461 mil 933 habitantes, según el INEI (Boletín Especial Nro. 22).

La tasa de aumento poblacional ha descendido a 1.1% anual. Y sigue bajando. Hace una década, en el 2000, la tasa era de 1.8; de ahí pasó a 1.6 en el 2003 y a 1.3 en el 2006.

Esto quiere decir que cada vez crecemos a menor velocidad. Si eso sigue así, llegaremos a la tasa de reemplazo. La tasa de reemplazo es el aumento que sólo permite sustituir a los que fallecieron o se fueron del país.

La caída del crecimiento poblacional es una mala noticia para la economía. Peor es, aún, la forma de esta caída demográfica. Está aumentando el número de habitantes de 0 a 14 años y el grupo que va de 64 años a más.

Estos dos grupos son, a grosso modo, los que menos aportan a la economía. En general, son dependientes de los que están en una edad activa desde el punto de vista laboral.

Lo que está pasando en el Perú es que aumenta la población inactiva a expensas de la activa. El grupo de 65 años y más ha mantenido una tasa de crecimiento anual de más del 3% desde el 2006.

Mientras la población total creció a una tasa de sólo 1.1 por ciento, la del grupo de edad de 65 a más, lo hizo a un ritmo de 3.3 por ciento.

Nuestra población peruana entra, así, a un proceso de envejecimiento. La vejez dura más y cada vez hay más viejos. Los viejos aportan menos recursos. En temas de salud, sus requerimientos son más costosos.

La atención de salud para los mayores es más prolongada y requiere mayor uso de tecnología médica y farmacéutica. La jubilación, además, está sostenida por los nuevos aportantes.

El número de personas que aporta crece cada vez a menor velocidad que las personas que reclaman atención y cuidados. Ello amenaza los sistemas de salud y los de jubilación.

Esta crisis demográfica es una bomba poblacional, pero al revés. No estamos preparados para enfrentar sus consecuencias. Los países más desarrollados están padeciendo crisis similares, pero lo hacen con un capital social acumulado enorme.

No es el caso del Perú. Nosotros recién empezamos a salir de la pobreza. Esta crisis de menor crecimiento-más envejecimiento puede frustrar el proceso de recuperación de la economía peruana.

El impacto de esta crisis sobre los mercados, el consumo y la producción será catastrófico en el largo plazo. Pero, ¿a quién le interesa eso? ¿A algún gobernante? ¿A algún candidato?

Nadie ve las cifras, y las cifras... nos caerán encima.

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* Tomado de: http://www.larepublica.pe/16-01-2011/bomba-demografica

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